Los trasplantes y viajeros habituales
El día 27 de febrero se celebra el Día Internacional de los Trasplantes de Órganos, gracias a que millones de personas cada año deciden donar una pequeña parte de sí mismos, para ayudar a otros a tener una vida un poco más duradera.

Para ser apto para donar órganos, se deben cumplir una serie de requisitos, tanto en personas vivas como en fallecidos, con el consentimiento previo de la persona.
Sin embargo, no todas las personas son aptas para donar órganos para futuros trasplantes a personas que lo necesiten.
Por ejemplo, es el caso de las personas que llevan viajando en avión constantemente durante varios años, ya sea por trabajo, negocios o por placer, o aquellas personas que trabajan en el sector aeronáutico como los pilotos o azafatas de vuelo.
Todo final es el principio de algo nuevo y mejor.
Anónimo.

Esto es debido a los efectos que sufre el cuerpo mientras viajamos en avión, debido principalmente a los cambios de presión, aunque puede tener otros efectos como deshidratación, problemas de circulación o de oídos, etc.
Estos cambios de presión afectan a los órganos que tenemos en el cuerpo, de manera que sufren compresión y descompresión durante el vuelo de forma sistemática, por lo que una persona que ha viajado constantemente durante varios años ya no puede ser apto para donar sus órganos. No solo no seria útil para la persona receptora del trasplante, sino que existen mayor probabilidad de rechazo, lo que puede tener consecuencias muy graves en la persona receptora.

Además, viajar constantemente en avión puede tener otras consecuencias como mayor riesgo de padecer cáncer, enfermedades cardiovasculares, déficit cognitivo, etc.
A pesar de esto, los pros superan a los contras, y no por eso debes dejar de viajar o tenerle miedo a subir en avión, ya que seguramente te perderías muchas experiencias y destinos increíbles.
